viernes, 22 de mayo de 2009

PRESOS EN RD - O To’ Toros o To’ Vacas



Vamos a ver más objetivamente el caso de los privilegios en las cárceles de nuestro país, debemos tener en cuenta que las personas que están condenadas a cumplir una penalidad es porque han infringido la Ley y, por ende se les priva de su libertad, y sólo tienen derecho a que se les cubran sus necesidades básicas, ya que es parte del castigo.

Este es el país de las mil maravillas, donde por ejemplo un condenado por delito bancario opina en un artículo de un periódico nacional y expresa que las cárceles de nuestro país deben funcionar como en España, “que puedan salir a trabajar y luego regresar a la cárcel”, ¿y entonces…?, a estos señores que antes de hablar se tomen su pastillita de ubicatex.

Pero no obstante esto, existen personas que pueden considerar la idea como buena y válida, y quizás se arme hasta un motín con los presos exigiendo derechos que no les corresponden.

Ya basta, en esto secundo a nuestros paisanos de TOYJARTO, ya que es la única palabra dominicana con la que nos podemos expresar ante esta situación, sí, ya estamos JARTOS de tantas injustitas en la justicia dominicana. No es posible que sólo unos cuantos tengan privilegios, privilegios éstos que han ocasionado muchos inconvenientes, como decimos en buen dominicano o to’ toros o to’ vacas, y si las reglas dice que no debe existir privilegios, comprendan NO DEBE EXISTIR PRIVILEGIOS, ni para los toros no para las vacas.

Además es hora de sacarles provecho a los convictos, ya que el ocio es el peor enemigo del hombre. Es el momento de aprovechar la capacidad que tiene mucha gente aquí y darles la oportunidad de desarrollar planes en beneficio y aprovechamiento de las personas que residen detrás de las rejas.

Aunque lamentablemente ponemos candado después que nos roban, pero aunque sea después del incidente ocurrido días atrás, este pueblo espera que se cumplan las reglas en nuestras cárceles.

martes, 19 de mayo de 2009

El Amargo Silencio - Abusos a los Menores en R D


Los llamados menores de República Dominicana, que no son más que adolescentes (menores de edad), están siendo víctimas de los más viles abusos que podamos imaginar, esta situación ya la vemos como muy normal y nadie dice nada.

No es raro ver como las personas consienten que en un recinto carcelario se permita la entrada de menores para practicar la prostitución, es muy penoso que se le catalogue como cualquier persona que tiene la capacidad de tomar decisiones, y es que por alguna razón los menores no se les otorga la cedula de identidad y electoral, se les prohíbe venderles bebidas alcohólicas, cigarrillos, etc., y no es menos cierto que la única verdad para esto es que no tienen la capacidad de madurez de decidir que le conviene y que no le conviene.

No podemos quedarnos ciegos ante esta situación, porque la sociedad está podrida y por eso, porque nuestra generación de jóvenes está desprotegida todo el mundo hace lo que le venga en ganas con ellos, sólo aprovechándose de la mala situación económica en que viven, bajo esta circunstancias es que desarrollamos una ola de delincuentes como la que contamos hasta ahora, ya que estos menores abusados, quedan en una profunda frustración y solo encuentran salida en las drogas, prostitución, etc., que es el único mundo que conocen para poder sobrevivir.

Ante esta situación lo único que podemos hacer como simples ciudadanos es no permitir que ante nuestros ojos se produzcan actos de abusos, en todos los sentidos, a menores de edad, y si es posible denunciar dichos abusos.

No podemos adaptarnos a ver esta situación, debemos actuar, protejamos a nuestra juventud, ellos son el futuro de nuestro país.

miércoles, 13 de mayo de 2009

Policía Nacional está literalmente descalificada por el Pueblo Dominicano


No es raro escuchar que personas (civiles) arremeten contra los delincuentes, a quienes en varias ocasiones le han privado de la vida. Y es que ésta no es más que una respuesta de una sociedad de la que está cansada de tanta impunidad ante el crimen.

Los civiles son víctimas, en cada momento, de asaltos, con y sin violencia, a lo que acuden a las autoridades en busca de que sea castigado el o los culpables, sin embargo, esta sociedad en múltiples ocasiones ha sido víctima de dejar sin efecto dicha querella o simplemente dejar en libertad a los delincuentes en unos cuantos días, a sabiendas de sus delitos, ¿Cómo? no se sabe, lo que si es una realidad es que el pueblo dominicano está cansado de ver ante sus ojos esta barbarie, de ver a los delincuentes burlárseles en la cara, cuando no son sometidos a cumplir ningún castigo, quizás por influencia o por simplemente desembolsar una cantidad X de dinero.

Es por esto que han tomado la justicia en sus manos, aunque esta acción es sumamente peligrosa, ya que para esto existe la justicia quien es la encargada de aplicar el castigo correspondiente a cada crimen o violación a las leyes.

Vemos ultimamente en nuestras calles de que civiles acribillan a presuntos o inminentes delincuentes a los cuales encuentran infragantes en el hecho. Quizás esta situación que haga reflexionar un poco a las autoridades y cuando se les presenten los casos de someter a la justicia a un delincuente lo hagan y de manera justa según el crimen así su condena, y de verdad que estaremos mas satisfecho de que en nuestro país se cumple con la ley.

miércoles, 6 de mayo de 2009

FALTA DE OPORTUNIDADES EN RD - UNA HISTORIA REAL



¿Cuál es la verdadera problemática que vive nuestra República Dominicana? Es cierto que todos tenemos bien claro que es la falta de oportunidades, y esta falta de oportunidades genera delincuencia, prostitución, alcoholismo, drogas, etc.

La gran mayoría de personas en nuestro país no tiene un empleo y quienes lo tienen no ganan lo suficiente para cubrir las necesidades básicas. Nuestros jóvenes se desarrollan en un ambiente donde todas las puertas se le cierran, y es de ahí donde su mente se distorsiona e incursionan en malos procederes, queriendo hacer valer sus derechos que son los mismos que los de cualquier joven con privilegios.

Tenemos que actuar, hacerle ver a los jóvenes y a la niñez que ellos tienen los mismos derechos y las mismas oportunidades que otros, que valoramos el esfuerzo que realizan para superarse, y que dichos esfuerzos no son en vano.

La delincuencia y problemas sociales que existe en los países emergentes como el nuestro, radica en el egoísmo y la avaricia de los gobiernos, quienes piensan más en garantizar su estabilidad de por vida y olvidándose el por qué el pueblo los eligió.

Si quienes nos gobiernan fueran personas objetivas, conscientes, con valores, y con amor a su Patria y a su cultura, otro gallo cantaría. Hay muchos que dicen “Es muy bueno echarle toda la culpa al gobierno”. Pues tengo para decirles que lamentablemente la situación que vive nuestro país es por la falta de responsabilidad social que ha existido y sigue existiendo en las personas que nos dirigen.

Cuando hablo de los gobiernos no me refiero a una persona en particular, sino a un conjunto de personas que hacen daño a su partido, ya que se sienten dueños del país porque hacen una campaña y creen deben sacarle todo el provecho posible mientras estén subidos en el palo.

Un pequeño relato es que cuando estaba cursando la asignatura de Sociología, escuchaba a los estudiantes decir: “¿y que tiene que ver esta materia con nosotros?” Y una de las cosas que marcó mi vida fue el hecho de que mi profesor de sociología nos enviaba a realizar encuestas a los barrios más marginados de nuestro país, específicamente una vez me trabajé con MAQUITERIA, un barrio marginado de Santo Domingo, en verdad nunca había escuchado ese nombre hasta ese día, la encuesta se trataba específicamente a los ingresos de las familias, el número de personas que la componían, cuántas comidas consumían diariamente, entre otras de la misma naturaleza.

Yo tenía a penas 16 años y no podía creer lo que me decían, pareciera un mundo aparte, otro planeta, cuando llevamos nuestro trabajo al profesor, muy bonito por cierto, el simplemente atinó a decir “bueno, todo el que entregó su trabajo tiene 95 puntos, y no hay examen final” a lo que sonreímos y dijimos uaoh que bien, y también nos dijo “Espero que desde hoy su percepción sobre la vida en nuestro país sea diferente y que de ahora en adelante valoren mucho lo que tienen, ya que como han visto hay personas que viven sumidos en un letargo de miseria y sin esperanza de despertar”.

Me gustaría que esa sea una asignatura impartida, de la misma forma que mi, a todo aquel que pretenda ocupar algún cargo político en mi país, y obtenga la misma impresión que sentí al realizar los trabajos de investigación.