jueves, 2 de abril de 2009

PROPONGO UN JUEGO PARA LOS FUNCIONARIOS PUBLICOS


Estamos cansados de cómo se piden las reinvidicaciones, siempre lo mismo:
1- Arreglo de las calles,
2- Bajar los productos de primera necesidad
3- Generación de empleo
4 -Aumento salarial, etc., hasta cuando. Debemos cambiar nuestros métodos de protestas:

Propongo crear un juego muy sencillo en el que todos los FUNCIONARIOS y hasta el mismo PRESIDENTE por un mes obtengan el salario que tienen la mayoría (los pobres), y que vivan sólo por un mes en uno de nuestros barrios: Villa Mella, Villa Duarte, Los Guandules, Las Cañitas, Los Cartones, Maquiteria, Gualey, Capotillo, entre otros, y que cubran sus necesidades con este salario como son: Comida, Pasaje, Productos de Higiene, Salud, Educación, etc., etc., etc.…
Estoy totalmente conevencida que obtendrán otro vocabulario, como ese muy común cuando vamos a comprar la comida “Co… pero estás loco eso si ta’ caro, dile a tu mad... que lo compre”, estarían en la línea y no tendrían que pagar gimnasio, ya que los molleros que le saldrán no serán pocos, de las tremendas caminatas por no tener ni para el pasaje, los productos de higiene ay ay ay, y cuántos no saben siquiera que es eso, aprenderán una buena frase muy familiar ¿la has escuchado? “limpiarte con lo que sea, eso son lo rico que usan papel”, ahora bien, en salud es que saldrán expertos porque conocerán todos los brebajes habidos y por haber y casi se envenenarán haciendo todas las tomas que le diga el vecino, ya que si van al hospital tendrán que esperar que se terminen todas las huelgas que les provoque hacer a los médicos y cuando lleguen a consultarse deberán pagar todos los medicamentos porque nunca hay. La educación será la mejor parte, ya que los hijos aprenderán palabras que nunca habían escuchado, en las escuelas públicas se encargarán de eso, además le enseñaran sustancia que nunca en su vida habían visto. Bueno para no cansarte:

Te aseguro que abandonarán antes de terminar el mes y no tendremos que hacer protestas, porque ellos mismos estarían preocupados de nunca más volver a jugar el jueguito que jugamos todos los pobres de este país cada día.

¡Solo póngase el SOMBRERO A QUIEN LE SIRVA.!

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